Los fondos indexados: el máximo exponente de la diversificación

Si por algo destacan los fondos indexados es por su excelente diversificación de compañías. Con una sola compra de participaciones de un fondo indexado al S&P 500 estarías invirtiendo, a efectos prácticos, en las 500 compañías más grandes de los Estados Unidos. O un fondo indexado al IBEX 35, invertir en él es sinónimo de invertir en una sola operación en las 35 empresas cotizadas más importantes de España.

En el primer caso hemos diversificado en las acciones norteamericanas, en el segundo en las españolas, pero ¿y por qué no invertir en las acciones de todo el mundo? De hacerlo, estaríamos invirtiendo en miles de compañías de todo el mundo. Para ello, existen fondos como el Vanguard Global Stock Index Fund.

Existe tal oferta de fondos índice que puedes escoger por mercados (EEUU, Europa, Asia), países concretos, mercados emergentes, latinoamérica...

Y todo ello con una sola operación de suscripción. Más fácil imposible.

Las ventajas de la diversificación son muchas:

  • A mayor diversificación, menor riesgo
  • Si diversificas en todo el mundo, disminuye el riesgo geopolítico.
  • Y por supuesto, las comisiones son bajísimas.

¿Qué quiere decir que las comisiones de los índices son bajas? Pues que este tipo de fondos tienen unas comisiones de aproximadamente el 0,3% sobre el patrimonio total invertido anual. Teniendo en cuenta que las comisiones de un fondo de gestión activa puede tener comisiones de entorno al 2% (más de 6 veces superior), se podría decir que los fondos indexados, también llamados fondos de gestión pasiva, cumplen su función y lo hacen con costes muy bajos.

¿Qué debo esperar de un fondo indexado de renta variable?

  1. Invertir en activos reales: estadísticamente son los que mejor combaten a la inflación, lo que les convierte en un buen instrumento para ahorrar o invertir a largo plazo.
  2. Invertir en compañías que producen, generan beneficios...: por este motivo, invertir en acciones es la inversión más rentable a largo plazo.
  3. Conseguir la misma rentabilidad que la media del mercado: no es poco si tenemos en cuenta que la mayor parte de los fondos de inversión de gestión activa no baten a sus índices (benchmarks).
  4. Volatilidad: si sabemos aprovecharla comprando cuando la bolsa baja puede suponer la diferencia entre rentabilidades buenas y rentabilidades excelentes.
  5. Comisiones bajas: las comisiones de gestión son ligeramente superiores al 0,3%. Es, probablemente la forma más eficiente de invertir en bolsa.
  6. Diferimiento fiscal en traspasos de un fondo a otro.

Como siempre es recomendable leer mucho para entender los riesgos de invertir en bolsa y asegurarnos que la inversión que hagamos con nuestros ahorros es la adecuada para nuestras necesidades y ver cumplidos nuestros objetivos de ahorro e inversión.

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