El asset allocation es una estrategia en la que un inversor decide en qué tipo de instrumentos financieros invertir según su naturaleza, obteniendo un equilibrio rentabilidad/riesgo adecuado para sus necesidades futuras y perfil inversor.
Existen varios tipos de activos básicos:
- Renta variable (acciones de bolsa)
- Renta fija
- Inmuebles (no son un instrumento financiero como tal, pero sí es un activo real y puede producir rentas vía alquiler)
En este caso, nos vamos a centrar en los fondos de inversión mobiliarios, es decir, en los que invierten en renta fija o renta variable.
El asset allocation también atiende al sector del activo (construcción, tecnología, consumo, servicios), su zona geográfica o mercado (España, Europa, Estados Unidos, economías emergentes, mercados desarrollados...).
Y por supuesto, un activo que también hay que tener en cuenta es la liquidez. La liquidez te permite protegerte ante caídas generalizadas de los mercados, disminuir el riesgo y aprovechar oportunidades de compra en escenarios de volatilidad.
Si tenemos los suficientes conocimientos financieros, podemos elaborar nuestra cartera nosotros mismos.
Los robo advisors son un claro ejemplo de asesoramiento de asset allocation. La función de un asesor automatizado es en qué tipo de activos invertir (asset allocation) según nuestro perfil inversor y nuestro horizonte temporal.
Si optas por invertir directamente en fondos de inversión, su asset allocation viene dado por su vocación inversora (puedes consultar su folleto).
Por ejemplo, los fondos de renta fija invierten exclusivamente en renta fija; los mixtos invierten en renta fija y variable; y los fondos de renta variable invierten en acciones de compañías cotizadas.
También existen los fondos mixtos, donde según el reglamento de gestión del fondo, se decantarán más por un activo u otro según las condiciones del mercado en cada momento.